No quería dejar escapar estas fiestas de navidad para salir a escalar.
Hay ya ganicas de tocar roca y de blocar un rato, pero si no se puede blocar, pues se pilla la cuerda y arreando.
Volvimos a Jaulín, cuna de los escaladores zaragozanos que disponen de poco tiempo, o para quien quiera iniciarse, o en mi caso, una vez más, iniciar a unos amiguetes disponiendo de poco tiempo, todo sea por conseguir nuevos adeptos y que todos disfruten de la roca. Como dice un gran hombre conocido mío: "No es mejor escalador el que más grado hace, sino el que más disfruta independientemente de su grado".
Aprobechamos, pues, un buen día de invierno, aunque un poco ventoso para terminar el año, en Jaulín. Un día memorable donde los haya, en gran parte, por la compañía: Dos amigos militares y otro geólogo (aprendiendo nuevas formas de disfrutar de la roca).
Por cierto, se me olvidaba. Descubrimos un pequeño bloque en el que poder hacer un poco de búlder como alternativa. Sacamos un par de vías, una fácil y otra de 5c o 6a. Está como si fuéramos al sector búlder, pero en lugar de girar a la derecha para ir a la pared, seguimos unos 20 metros más rectos.
Aquí os dejo unas fotillos:
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